
Os comparto el artículo que recientemente he publicado en la revista aDResearch ESIC.
Se trata de un experimento realizado con usuarios de redes sociales, utilizando herramientas de neuromarketing para conocer el engagement que generan los recursos que a menudo utilizamos en ellos. Las herramientas utilizadas nos han permitido conocer no solo las emociones que se generaban (usando el Face Coder que detecta las microexpresiones faciales y nos indica la emoción que sentimos ante un estímulo), sino también su intensidad (utilizando el GSR Galvanic Skin Response que mide el nivel de conductancia de la piel y que también se usa en el famoso detector de mentiras). Asimismo, se hizo uso de la herramienta Eye Tracker para conocer qué miraba en cada momento la persona participante controlando la posición de su pupila.
Una segunda parte del estudio nos permitió conocer las actitudes implícitas con respecto a las marcas de prestigio (a través del test de asociación implícita). Es decir, aquello que realmente sentimos y que o bien no verbalizamos o ni tan siquiera somos conscientes que sentimos.
Los resultados nos han acercado hacia las características que debe tener un recurso para entusiasmar a los usuarios. No vale con generar una emoción positiva, debemos sorprender para activar a nuestros clientes hacia la compra.
Para aquellos que estéis interesados os dejo aquí el link
Comments